por José Ramón Hidalgo

Me gustaría compartir  en unas breves líneas mi experiencia como voluntario en cooperación internacional. Fue en el año 2019, cuando tuve la inmensa suerte de desarrollar un proyecto de refuerzo del sector apícola en Tarija (Bolivia). En esta ocasión lo hice de la mano de FELCODE (Fondo Extremeño Local de Cooperación para el desarrollo) y de la Diputación Provincial de Badajoz.

Es difícil calificar con una sola palabra este tipo de experiencias, ya que tiene que pasar el tiempo para ser consciente del crecimiento personal y profesional que se experimenta trabajando con personas de otras nacionalidades y en un terreno que no es al que estas acostumbrado. Independientemente de esto me quedo con la calidad de las relaciones humanas que se logran en estos lugares, puede decirse que me traje de Bolivia mucho más de lo que llevé.

Trabajé codo a codo con el Gobierno Municipal de la Ciudad de Tarija, concretamente en la concejalía de Desarrollo Económico y Productivo. El sistema organizativo es muy parecido al de Extremadura, ya tiene muchas zonas rurales y una población muy dispersa, por esta razón están apostando fuerte para fijar la población en los entornos rurales y entre otras cosas elaboran programas para el fomento del desarrollo en estas zonas, están enfocados a reforzar los diferentes sectores productivos, con el fin de establecer unos cimientos sólidos sobre los que construir la base para una economía rural productiva y en equilibrio con el Medio Ambiente.

El voluntariado es una de las formas más bonitas de dedicar el tiempo, es una opción más que te permite adquirir experiencia en diferentes sectores a los que sería complicado acceder por otros medios, esto te permite adquirir una experiencia que puede ayudarte en gran medida al diseño de tu futuro laboral y en mi caso hasta la propia forma de vivir la vida, ya que ves otras realidades muy distintas a la uno mismo por lo que aprendes a valorar y a relativizar muchas cosas.

Para finalizar me gustaría animarte, y que des el paso a emprender una experiencia de voluntariado, es muy sencillo ya que puedes hacerlo con multitud de entidades que seguro tienes muy cerca de ti. Date el gusto de experimentar en primera persona ese sentimiento de vocación de servicio, de dar sin esperar nada a cambio y de aportar todo lo bueno de ti a otras personas o causas, deja que la magia del trabajo sin ánimo de lucro te devuelva todo lo que das en forma de afecto, sabiduría, experiencia y amistades que durarán toda una vida.

Categorías: En el Mundo

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